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Loreto tiene un secreto que se le ha hecho bola. Le cuesta mucho compartirlo y se siente muy sola. Ella, en el fondo, lo quiere contar, pero no sabe ni por dónde empezar. Menos mal que siempre tiene en quien poder confiar.
Marcos y Julia están sorprendidos. Parece que el mundo se ha dividido. Entre niños y niñas, entre azules y rosas, pero... ¿cuál es el motivo Ya ves tú qué cosas. Algo habrá que hacer. Así, divididos, no quieren crecer.
Una edición especial de la colección Ande yo valiente para decir a nuestros hijos e hijas lo orgullosas que estamos de ellos. Porque, realmente, nos están enseñando lo esencial de la vida. Este no es un libro sobre el coronavirus. Es un libro sobre los aprendizajes que nos deja. Muchos de ellos, seguramente, ocurrían antes pero a lo mejor no éramos...
¡Vamos Isa! ¡Más deprisa! Venga, corre, entra, mira... Sube, sigue, vuelta, tira... "Este ritmo me trastoca. voy siempre como una loca". ¡Ay! ¡De verdad! ¡Pobre Isa! Si en realidad no es suya la prisa.
Armando necesita llorar, pero nadie le quiere dejar.Le dicen que es de "niñas", de flojeras, de cobardes, de pequeños...Menos mal que al final, Armando descubre que hay ciertos nudos que solo se deshacen llorando.
Nicolás, a punto de decir que así no se comparte. ¡Ay, madre! Se masca la tragedia en el parque... Respetar y cuidar las cosas ajenas... ¿Y si ese fuera el verdadero aprendizaje?
Mientras no me suceda a mi... mejor no me meto... Renata sabe perfectamente que las injusticias hay que contarlas. ¡Olé, Renata!
Antes de Reyes, ya no vale eso de "lentejas, si quieres las comes y si no las dejas". Violeta, chamuscada ya en octubre, pensando en la que se le viene encima con tanta preguntita de si se ha portado bien.
Marta reparte sus besos como ella decide y no siempre es a quien se los pide. Algo muy normal, si te paras a pensarlo, aunque algunos adultos no acaban de aceptarlo.¿Por qué es tan difícil de entender? En mis besos mando yo. Lo deberías saber.
Teresa no quiere ser princesa, ni dulce, ni sumisa, ni con labios de fresa. Ella prefiere en los charcos saltar.¡Las 'cosas de niñas' se han de acabar! ¡Ni siempre de rosa! ¡Ni siempre esperando!¿Acaso no ves que el cuento está cambiando?
El tío Paco anda muy preocupado. Hay algo que le ha desconcertado. Su sobrino, el pequeño Benito, quiere comprarse un carrito. ¡Qué locura, qué alboroto! ¿Por que no preferira una moto?